La norma EN 15090 especifica los requisitos mínimos y los métodos de ensayo para las prestaciones de tres tipos de calzado para bomberos en operaciones de rescate. El calzado para bomberos y, en general, para los riesgos derivados de la lucha contra incendios, ofrece protección a los pies y las piernas del usuario contra lesiones o daños que pueden sufrirse durante el trabajo: aplastamiento de los dedos, impactos contra objetos pesados en los dedos, perforación del pie al pisar objetos puntiagudos, golpes en la zona del talón, contacto con superficies calientes, contacto de los pies y las piernas con agua y humedad, calor radiante, llamas.
La norma EN 15090 clasifica el calzado en tres tipos:
Tipo 1
Calzado apto para trabajo en exteriores, incendios forestales; sin protección contra la perforación, sin protección de los dedos del pie, sin protección contra riesgos de tipo químico. Calzado apto para operaciones generales de rescate, lucha contra incendios con presencia de combustible vegetal como bosques, arbustos, cultivos y hierba.
Tipo 2
Calzado apto para todas las operaciones de lucha contra incendios y rescate en las que se requiere protección contra la perforación y protección de los dedos del pie, pero no protección contra riesgos de tipo químico. Calzado apto para la lucha contra incendios, extinción de incendios, comprobación de estabilidad de edificaciones, vehículos, naves y estructuras que han sufrido incendios o situaciones de emergencia.
Tipo 3
Calzado apto para todas las operaciones de lucha contra incendios y rescate en las que se requiere protección contra la perforación y protección de los dedos del pie, incluyendo protección contra riesgos de tipo químico. Calzado apto para operaciones de emergencia que comportan la liberación, incluso potencial, de sustancias químicas peligrosas al ambiente, que puede provocar daños a estructuras, al medio ambiente, lesiones personales e incluso la muerte.
Apto también para el rescate en incendios, la extinción de incendios y la consolidación de estructuras en aeronaves, edificios, edificaciones cerradas, vehículos, naves o estructuras análogas que se hayan visto expuestas a situaciones de incendio o emergencia (válido solo para el calzado enteramente de caucho o material polimérico de la categoría II). El calzado para bomberos se marca con un símbolo específico y la indicación del Tipo.
