El calzado de uso profesional forma parte de los denominados «equipos de protección individual» (EPI), y está pensado para proteger los pies del trabajador que lo utiliza contra varios riesgos: mecánico (deslizamiento, golpes, compresión, perforación, corte, etc.), químico (contacto con hidrocarburos, aceites minerales, etc.), físico (humedad, agua, calor, frío, etc.) y eléctrico (propiedades antiestáticas, propiedades conductoras, etc.).
La categoría está sujeta a los requisitos esenciales dispuestos en el Reglamento (UE) 2016/425 en materia de ergonomía, inocuidad, confort y eficacia. Las propiedades protectoras del calzado son distintas según las exigencias específicas de uso. La elección del calzado correcto para uso profesional depende de las propiedades protectoras del mismo y de los riesgos presentes en el lugar de trabajo.
El calzado para uso profesional está disponible en varios materiales y se clasifica en 2 categorías:
I. Calzado de cuero u otros materiales, excluyendo el calzado enteramente de caucho o material polimérico (p. ej., calzado con corte de cuero y suela de poliuretano o caucho).
II. Calzado enteramente de caucho o material polimérico (p. ej., botas enteramente de caucho o PVC).
Según las características de protección estas dos categorías pueden subdividirse en 3 tres tipos:
Calzado de seguridad provisto de puntera de protección contra los impactos de hasta 200 J de fuerza o compresiones de hasta 15 kN (de conformidad con la norma armonizada europea EN ISO 20345).
Calzado de protección provisto de puntera de protección contra los impactos de hasta 100 J de fuerza o compresiones de hasta 10 kN (de conformidad con la norma armonizada europea EN ISO 20346).
Calzado de trabajo sin puntera de protección (EN ISO 20347).
Todo el calzado para uso profesional debe respetar algunos requisitos básicos relativos a la duración, al confort y a la inocuidad del material.
Además, tienen que garantizar resistencia al deslizamiento con protección específica en relación con la reducción del riesgo de resbalar en superficies mojadas: Los calzados se prueban en un suelo cerámico cubierto de agua y detergente.
Los calzados marcados como SR se someten, además, a una prueba sobre un suelo cerámico recubierto de glicerina.
Además, se pueden prever protecciones adicionales para riesgos específicos (riesgo mecánico, químico, físico y eléctrico): propiedades antiestáticas (A), absorción de energía en la zona del talón (E), resistencia a la perforación del fondo (P inserción metálica, PL o PS inserción no metálica), penetración y absorción de agua del corte (WPA), resistencia del calzado al agua (WR), suela resistente a los hidrocarburos (FO), suela resistente al calor por contacto (HRO), aislamiento contra el frío (CI), o el calor (HI), protección metatarsal (M), protección del tobillo (AN), resistencia al corte (CR), sistema de agarre en escalera (LG), resistencia a la abrasión de la puntera (SC).
Por último, hay una serie de categorías de protección que resumen las características de protección más comunes, divididas en diferentes categorías:
SB: dotado con puntera de seguridad 200j, resistencia, inocuidad y rendimiento de los materiales, ergonomía y comodidad del calzado, protección antideslizante suelo de cerámica + limpiador.
S1: como SB + zona del talón cerrada, propiedades antiestáticas, absorción de energía en la zona del talón.
S1P: como S1 + resistencia a la penetración con lámina metálica tipo P.
S1PL: como S1 + resistencia a la penetración con lámina no metálica tipo PL.
S1PS: como S1 + resistencia a la penetración con lámina no metálica de tipo PS.
S2: como S1 + resistencia a la penetración y absorción de agua del corte.
S3: como S1P + resistencia a la penetración y absorción de agua del corte y suela con relieves.
S3L: como S1PL + resistencia a la penetración y absorción de agua del corte y suela con relieves.
S3S: como S1PS + resistencia a la penetración y absorción de agua del corte y suela con relieves.
S4: como S1 (sólo válido para calzados de caucho o polímero de clasificación II).
S5: como S4 + resistencia a la perforación del fondo del calzado (P) y suela con relieves.
S5L: como S4 + resistencia a la perforación del fondo del calzado (PL) y suela con relieves.
S5S: como S4 + resistencia a la perforación del fondo del calzado (PS) y suela con relieves. S6: como S2 + resistencia del calzado al agua.
S7: como S3 + resistencia del calzado al agua. S7L: como S3L + resistencia del calzado al agua.
S7S: como S3S + resistencia del calzado al agua.
La marca que lleva el calzado dilucida las propiedades protectoras que este ofrece, mediante las siguientes indicaciones:
• marcado
• número del calzado
• nombre o logotipo del fabricante
• código del artículo
• fecha de fabricación
• norma de referencia
• símbolos y/o categorías de la protección ofrecida
Cada par de zapatos, además, va acompañado por una nota informativa que proporciona indicaciones sobre los modos correctos de uso, almacenamiento, mantenimiento, limpieza y/o desinfección/descontaminación, explicaciones sobre el marcado e información específica para algunas categorías de protección.
Para situaciones de riesgo particulares, existen zapatos especiales con protección adicional. Entre estos, los zapatos con protección contra el corte con sierra de cadena de mano, con aislamiento eléctrico, para bomberos, antiestáticos (ESD).